Niño monstruoso nacido en Turquía

En un rectángulo definido por un pequeño ornamento vegetal y simulando un espacio natural con un suelo con vegetación, se reproduce el supuesto retrato de cuerpo entero de un niño de pie y desnudo para poder apreciar bien sus características físicas, las que se pretenden monstruosas. Estas se centran en los pies (no en las piernas, a pesar de la descripción del texto) que se extienden hacia la espalda, y en la cabeza, donde se observan los “tres ojos, tres cuernos, las orejas de jumento, la nariz de una ventana”.  El niño tiene el brazo izquierdo extendido y el derecho flexionado, indicándose a sí mismo a la altura del pecho, con el dedo índice, como presentándose.

En la segunda mitad del siglo XVI y con la expansión del Imperio Turco, se producen continuas guerras en Centro y Sur de Europa, aquí por el control del Mediterráneo, especialmente contra los intereses de los Habsburgo, luchas que van a continuar en el XVII (con numerosas batallas, en concreto marinas, precisamente este año de 1624). Una forma de propaganda es mostrar la intervención divina con señales asombrosas en la naturaleza, las cuales pronosticarían la pronta caída del enemigo, considerado sobre todo enemigo de la religión cristiana ya que los turcos son musulmanes. Este tipo de relatos son muy numerosos en estos momentos. Y por eso, el niño monstruoso es hijo de un sacerdote turco (musulmán), y los propios sabios locales habrían hecho la siguiente interpretación, preocupante para sus gobernadores: “Este cuerpo humano, no sin causa … formado de la naturaleza, representa el Estado Turquesco, los tres cuernos significan el poder, y dominio que tiene el Turco en las tres partes del mundo, Asia, Africa y Europa; por los tres ojos la vigilancia que tiene mas que otro qualquiera señor, que señorea el universo, que es en el ocupar sus súbditos en tres cosas principales, como son la multiplicación de la especie, la agricultura, y las armas; por las orejas de jumento, por ser animal dotado de gran dureza… pericia Marcial… por sola una ventana de nariz, se debe entender la ley de Mahoma, que no admite otro sentido que solo el literal; por los pies y piernas al rebes, se manifiesta la falta de Estado Otomano: por que assi como hasta agora ha tenido el derecho progresso, assi en los pies al rebes ha de volver al contrario” (s.pág.). Por eso, su conocimiento es útil a los gobernadores cristianos: “Permita Dios… que los Principes Christianos conozcan la ocasión que se les ofrece de seguir los alcances de los enemigos, pues la palma y victoria parece que con notables prodigios nos la está mostrando el Cielo” (s.p.). Con ese objetivo y no solo dirigido a los gobernantes sino sobre todo a los pueblos, la difusión de este texto fue considerable.

Biblioteca Nacional de España. MSS/18182(H.400r.-401V.)
https://datos.bne.es/edicion/a6670390.html

Como dice en la portada, se imprime en Granada, en la Imprenta de la Real Chancillería por Francisco Heylan, pero siguiendo un original, impreso en Madrid, que no conocemos. Sí conocemos dos versiones más de este relato con otras dos imágenes parecidas pero no iguales (Alcalá, 1624, https://datos.bne.es/edicion/bima0000111316.html ; y Madrid, 1647, https://datos.bne.es/edicion/a5289904.html ).

• Carrete Parrondo, J. El grabado y la estampa barroca. En Summa Artis. Historia General de Arte.Vol. XXXI. El Grabado en España (siglos XV- XVIII) (p. 313). Espasa Calpe.
• Carrete Parrondo, J., Fernández Delgado, J. y Vega González, J. (1982). Estampas. Cinco siglos de imagen impresa. Ministerio de Cultura, Dirección General De Bellas Artes, Archivos y Bibliotecas, p. 130.